Cuando hablamos de cuidados de la piel es muy común pensar que el rostro es la zona a la que debemos dirigir con mayor intensidad nuestro foco de atención, pero cometemos el error de restarle cuidados a áreas muy delicadas como la del cuello y el escote. ¿Por qué debemos cuidar estas zonas?
La principal razón por la que debemos darle cuidados especiales a estas zonas es porque la piel del cuello y el escote es más fina, con mayor tendencia a deshidratarse y a perder la elasticidad; por lo que si no se protegen, son el primer lugar donde se manifiestan los signos de la edad.
Dado que la piel es tan fina, la debilidad del tejido y la acumulación de grasa pueden generar flacidez o la aparición de papada. Por otro lado, la ruptura de las fibras elásticas y la pérdida del colágeno favorecen la aparición de arrugas finas.
También hay que sumar que en estas zonas no nos aplicamos protector solar de forma frecuente, motivo por el cual suelen aparecer manchas oscuras en la piel con el paso del tiempo.
Lo primero, es que recuerdes extender los cuidados que le das a tu rostro al cuello y escote. Usa desmaquillante, limpia con un tónico sin alcohol que nivele el pH y aplica suficiente crema hidratante; lo mismo al emplear mascarillas y exfoliante (2 veces por semana). Utilizar crema reafirmante es un buen plus, y cuando la apliques, masajea el cuello de abajo hacia arriba y el escote con movimientos circulares. De la misma manera, como proteges tu cutis del sol debes hacerlo con tu cuello y escote. Se recomienda un protector solar anti-edad de SPF 50+. La crema hidratante que te apliques debe favorecer el transporte de agua a las capas profundas de tu piel y proteger la barrera cutánea, para eso nota que sea una combinación de proteínas, pro-ceramidas, ácidos grasos esenciales y vitaminas.
Combate los signos del envejecimiento con un potente antioxidante anti-age que contenga sustancias como el resveratrol, este tiene magníficas propiedades anti-arrugas, y anti-flacidez, ayudando a mantener una apariencia fresca y joven.
Un consejo que te ayudará a mantener la piel suave y lisa es poner el cuello y el escote bajo la ducha durante algunos minutos, alternando entre agua caliente y fría. También puedes hacer algunos ejercicios faciales como pronunciar las vocales abriendo la boca tanto como puedas o intentar tocar tu nariz con la lengua.
Es importante cuidar la postura, mantén derecha la columna en tus actividades cotidianas, si duermes de lado utiliza una almohada alta y si es boca arriba usa una almohada fina, esto compensa la posición.
Mientras más pronto empieces a prestarle atención a estas áreas, mejor.